Es la duda de muchas madres primerizas. La principal condición para hacer el proceso de lactancia de forma correcta es que la postura tanto del bebé como de la madre sea la adecuada ¿Cómo saber si lo estás haciendo bien? Primeramente que los dos estén cómodos, descubre a continuación todo sobre cuál es la posición adecuada al momento de alimentar a tus hijos.
¿El bebe no se engancha al pezón? ¿Lastima cuando los amamantas? ¿No encuentras la posición idónea para colocarlo? Son muchas de las dudas y situaciones más recurrentes ante la falta de experiencia en una tarea maravillosamente intima entre la madre y su bebé.
Primero que todo, ¿La posición correcta existe? No, no hay una situación en la que se esté haciendo bien o mal producto de si amamantas a tu hijo acostada o recostada. La premisa de hacerlo correctamente se fundamenta en una única, que los dos estén cómodos cuando se amamanta. Cada mamá debe ubicar la forma y la postura que más naturalmente se adapte a los dos cuando le das pecho a tu hijo.
Sin embargo, te damos algunos consejos y truquillos que puedes tener presente para ahorrarte tiempo y responder a todas aquellas preguntas e inseguridades que te hacen desconfiar de estar haciendo una labor adecuada, sin importar la posición que escojas.
¿Cuál es la posición para amamantar más cómoda?
Precisamente por esta pregunta existe esta web. Aunque es verdad que no hay una posición idónea o incorrecta, solo una postura cómoda, amamantar a tu bebé reclinada o sentada en una cómoda mecedora de lactancia es la mejor opción. ¿Por qué?
- Descanso: Tanto tu hijo como tu estarán cómodos en la lactancia, descansaras tu espalda, piernas, la cintura y tus brazos en un acojinado sillón de maternidad.
- A la hora de dormirlo: el suave movimiento de la mecedora ayudara a que tu bebé se duerma más rápida y profundamente, e incluso, tu también puedes tomar una siesta en la mecedora una vez recuestes a tu hijo en la cuna.
- Apoyo: Mientras das el pecho a tu bebé puedes usar el apoyabrazos de la mecedora para ayudarte a cargarlo y así descansar los brazos.
- Postura: es más fácil adoptar diferentes posturas con un sillón de lactancia, puedes mantenerte erguida, sentada, reclinada e incluso en algunos modelos acostarte casi completamente elevando las piernas.
- Comodidad: una superficie acojinada es más cómoda para amantar al niño, el apoyo y la suavidad de la superficie de la mecedora es especial en este sentido.
Consejos para dar pecho a tu bebé
- Si estas sola asegúrate de tener a mano todo lo que necesitas a la mano para amamantar al bebé.
- Es importante la postura del bebe, que el cuello, su cabeza y su espalda no estén torcidos.
- Asegúrate de sostener a tu hijo de forma que él esté cómodo y bien sujeto en tus brazos.
- El bebé debe agarrarse del pecho para comenzar a mamar.
- Si el bebé no se agarra correctamente, puede lastimarte. Si no encuentras la posición correcta puedes ayudarte de un pediatra especialista o de una madre experimentada que ya haya pasado por el proceso de alimentar a sus propios hijos para que te orienten.
Otro aspecto importante es estar relajada, no debe ser una tarea incomoda. Poco a poco encontraras la posición que mejor se adapte a tus necesidades y perfeccionaras tu técnica hasta que sea lo más natural posible.
¿Como sujetar a tu bebé?
Para estimular en tu bebé la succión de leche, coloca la nariz de este a la misma altura del pezón y su instinto le hará abrir la boca. En algunos casos puedes dirigir con la yema de tus dedos el pezón a su boca de forma que sus labios cubran la aureola del pecho.
La posición de la madre recostada o sentada será más instintiva para el bebé al estar sobre tu estómago y cerca al seno, que le hará querer encontrar la postura correcta para alimentarse.
Agarre del bebé al pecho
Cuando el bebé esté siendo amamantando, aleja su nariz del pecho manteniendo la boca en el pezón, así podrá tomar la leche respirando adecuadamente.
Practica sentándote en la mecedora en posición vertical, apoyando el cuello y la cabeza de tu bebé en tu antebrazo y su cuerpo sobre tu estómago buscando que todo su cuerpo este de lado.
Si el bebé no ve el pezón ni la aureola al momento de amamantar, significa que está en la posición correcta, asegúrate que su boca esté bien abierta sobre el pecho para que pueda succionar sin problemas. Asegúrate que el agarre sobre el pezón no sea superficial o podrías sentir dolor en tu pecho. Durante los primeros días puedes ayudarte de una mano para acomodarle correctamente el pecho en la boca.
¿Acostada para lactar?
Es perfecta para la primera vez que se va a amantar. Tu te recuestas de forma lateral al igual que tu hijo, asegúrate de ponerle un cojín o toalla en su espalda para que el bebé no pierda la posición natural de costado, especialmente en los recién nacidos.
Esta postura también es la más cómoda para alimentarlo en la noche o cuando la madre ha tenido un parto con cesárea.
Vaciado completo del pecho
Si tomas a tu hijo como si fuera un «balón de futbol americano» o «balón de rugby» de forma que quede debajo de tu brazo ayudara a que los conductos maternos se desocupen, la leche no se retenga y no sufras de mastitis.
Es especial para alimentar gemelos o cuando mamá ha pasado por una cesárea, así el niño no se apoyara sobre la herida del estómago. El mejor asiento para adoptar esta posición es en una mecedora para lactancia, ya que puedes apoyar tu brazo en el apoyabrazos mientras lo sostienes.
Una posición perfecta para amantar bebé prematuros y mantener una mirada vigilante sobre su rostro en todo momento.
¿Sentada para lactar?
Para amantar a tu hijo sentada es importante que tu espalda se apoye sobre el espaldar del sillón, así evitar dolor de espalda al mantener una posición erguida por mucho tiempo sosteniendo el peso de tu bebé con los brazos.
Acerca su cuerpo a tu pecho acercándolo suavemente empujando ligeramente su espalda, nunca por la nuca. Es una posición más recomendada para aquellos bebés con poco desarrollo muscular, como es el caso de niños prematuros o para aquellos que no consiguen agarrarse adecuadamente.
Recomendamos que mamá sujete el pecho con todos los dedos de la mano por debajo de este, pero dejando el dedo indice libre, este servirá para sostener suavemente la mandíbula del bebe manteniendo el dedo en forma de U, dirigiendo su boca al pezón.
